¿Qué son los sudores nocturnos?
Los sudores nocturnos son episodios recurrentes de sudoración intensa que se dan por la noche, mientras dormimos. Hay casos en los que se puede llegar a mojar el pijama o incluso las sábanas. Generalmente, la causa de esta sudoración puede ser las condiciones climatológicas de elevada temperatura o una afección o enfermedad subyacente.
Aunque si bien es cierto que las altas temperaturas pueden hacernos sudar durante el descanso, los episodios provocados por esto no suelen clasificarse como sudores nocturnos y no indican la presencia de una afección o enfermedad.
¿Cuáles son las causas de los sudores nocturnos?
Las principales causas de los sudores nocturnos son las siguientes:
- Una sobreproducción de hormona tiroidea.
- Consumo excesivo de alcohol.
- Algunos tipos de cáncer.
- Apnea del sueño. Si quieres saber más sobre esta afección, tenemos un post dedicado a la Apnea del Sueño.
- Infecciones.
- Ansiedad.
¿Cuándo debo preocuparme por los sudores nocturnos?
Por lo general, los sudores nocturnos no suelen ir asociados a problemas en nuestra salud, y no hay nada de lo que preocuparse. Muchas veces la causa es el exceso calor en la habitación o el habernos abrigado en exceso para dormir, ya sea usando un pijama muy abrigado o muchas mantas.
El momento en el que debemos preocuparnos por la sudoración nocturna es cuando es algo recurrente, y que además, va acompañado de algún otro síntoma como fiebre, escalofríos, dolores en el cuerpo, pérdida de peso o problemas gastrointestinales.
¿Cómo puedo manejar los sudores nocturnos?
- Alimentación saludable: Para estar bien, es fundamental cuidar de nuestro cuerpo, y para ello, debemos tener una dieta equilibrada, basada en alimentos de calidad y variados. Es fundamental para mantener una salud adecuada que sigamos una dieta rica en frutas y verduras y que el consumo de alimentos procesados y azúcares, sea lo más reducido posible.
- Ejercicio físico: El ejercicio físico, es nuestro aliado para mantener un estilo de vida saludable.
- Evita el estrés: Los nervios, el estrés y la ansiedad están muy ligados a la sudoración. Cuando nos encontramos en un estado de estrés o ansiedad, nuestro cuerpo produce cortisol y adrenalina, sustancias que aceleran nuestra frecuencia cardiaca y, por lo tanto, aumenta la sudoración corporal.
- Rutina de sueño: Mantén una rutina de sueño regular, acostándote y levantándote a la mismo hora todos los días. Mantén tu habitación con una temperatura adecuada para dormir bien. Evita dormir en una habitación demasiado caliente o demasiado fría.
¿Existen tratamientos médicos para los sudores nocturnos?
Si la duración, no viene acompañada de otros síntomas como los mencionado anteriormente, probablemente se trate de un problema de Hiperidrosis, por lo que nuestra recomendación es que acuda a tu dermatólogo y le cuentes tu situación, para que pueda darte alguna solución.
Si por le contrario, la sudoración excesiva viene acompañada de otras afecciones tales como dolores, fiebre, escalofrío, pérdida de peso... acude a tu médico para que pueda llevar a cabo un estudio en profundidad para poder poner la solución idónea al problema.