El mundo de los sueños siempre ha sido un mundo aparte. Ser sonámbulo es un fenómeno nocturno digno de película, porque cuando tu cuerpo puede estar en movimiento, tu cerebro no se percata de absolutamente nada del exterior.
¿Qué es el sonambulismo y por qué tu cuerpo se lanza a la aventura?
Es un trastorno del sueño que se caracteriza por realizar actividades motoras complejas mientras se está en un estado de sueño profundo. Las personas que experimentan sonambulismo pueden realizar una variedad de acciones mientras están dormidas, como caminar, hablar, mover objetos e incluso salir de la casa, todo esto sin tener conciencia de lo que están haciendo.
Debes tener en cuenta que el sonambulismo no es lo mismo que los sueños lúcidos:
- Modo automático: El sonambulismo es como si tu cuerpo tuviera su propia agenda. Tu cerebro está disfrutando de su merecido descanso, mientras tu cuerpo puede decidir por si solo si caminar, hablar, o incluso hasta salir de casa. Pero no te preocupes, normalmente son acciones repetitivas como caminar en círculos o repetir lo mismo varias veces. Tu conciencia es muy reducida y no te das cuenta de nada, incluso si alguien intenta despertarte, le va a resultar toda una misión de rescate🤠. Al despertar no recuerdas casi nada o nada de lo que ha pasado.
- Sueños lúcidos: En este caso estás dándote cuenta totalmente de que estás soñando mientras estás dormido. A diferencia del sonambulismo, en los sueños lúcidos la persona puede tener cierto grado de control sobre la trama, las acciones y el entorno del sueño. Esto te permite luego recordar con más facilidad todo lo que ha ocurrido en tu película mental improvisada 🎞 para contársela a tus amigos.
¿Por qué tu cerebro mueve tu cuerpo mientras debería estar en reposo?
No es que tu cerebro esté organizando una fiesta secreta a tus espaldas mientras duermes. Hay algunas razones detrás de este comportamiento extraordinario:
- Fases del sueño profundo: El sonambulismo encuentra su momento de dar el show 🤸♀️ en las etapas más profundas del sueño, en particular durante la fase conocida como sueño de ondas lentas. En este momento, el cerebro tiene más inactividad en comparación con las fases de sueño ligero o REM. Durante el sueño profundo, normalmente el cuerpo se queda quieto, pero hay ocasiones que las señales entre las partes del cerebro responsables de mantener el cuerpo en reposo y las que controlan el movimiento pueden entrar en disputa. Y es aquí cuando se activa una batalla campal en tu mente mientras tú estás felizmente descansando.
- Causas desencadenantes: El sonambulismo no es un capricho nocturno. Una serie de factores pueden servir como bomba para despertar este comportamiento. El estrés acumulado, la falta de sueño debida a ritmos de vida acelerados, el consumo de alcohol, ciertos medicamentos y los horarios irregulares pueden desencadenar a un desfile nocturno por la red carpet del pasillo de tu casa. Aunque en algunos casos también existe el factor genético, ya que puede transmitirse de generación en generación 👨👩👧👧.
¿Cómo puedes evitar pasear sin tu propio permiso?
A pesar del carácter enigmático del sonambulismo puede sobrellevarse y no complicarnos más la vida. No hay necesidad de convertir tu hogar en una pista de obstáculos. Te dejamos algunos consejos para evitar que ese culo inquieto se mueva sin tu aprobación:
- Rutinas de relajación: Practica técnicas de relajación 💆♂️💆♀️ antes de acostarse, como meditación o respiración profunda. Reducir el estrés y la ansiedad puede disminuir las posibilidades de que tu cuerpo se lance a la aventura.
- Horarios de sueño regulares: Intenta mantener una rutina constante ⌚ para acostarte y levantarte. Un patrón de sueño regular ayuda a tu cuerpo a estableces un ritmo saludable y prevenir que tu subconsciente se escape de casa.
- Evita estímulos antes de dormir: Limita la exposición a pantallas brillantes 📵 y actividades estimulantes antes de acostarte. Esto puede ayudar a que tu cerebro se prepare para el sueño en lugar de ponerlo en modo "explorar".
Aunque es más común en niños y tiende a disminuir con la edad, en algunos casos puede persistir en la adultez. Aunque en muchos casos no se requiere tratamiento, es importante tomar medidas de seguridad si el sonambulismo presenta riesgos